Mario "Catato" Cordero
Uno de los grandes mitos en la historia del fútbol costarricense, Mario
Cordero es una de esas leyendas que trascienden el tiempo. Con un físico
privilegiado, desde muy niño dejó entrever en los terrenos cercanos a Plaza
González Víquez que tenía unas cualidades extraordinarias para el deporte.
Jorge Bolaños, uno de los primeros jugadores del Saprissa, llevó a su amigo
a probar suerte con el equipo que dirigía Beto Fernández. El entrenador intuye
todo el potencial del joven jugador, pero su corta edad le impide incorporarlo
en la delegación que en 1941 viaja a El Salvador a realizar una gira
internacional. Ya para 1942 era titular indiscutible del infantil que escalaría
posiciones hasta alcanzar el boleto para la Primera División.
Como jugador, Catato consiguió los títulos de Tercera y Segunda División,
así como los centros de 1952, 1953, 1957, 1962 y 1964 en la máxima categoría.
Durante la gira alrededor del mundo marcó cinco tantos y fue pieza fundamental
del seleccionado nacional tanto en las eliminatorias mundialistas como en los
Centroamericanos y en los Juegos Panamericanos en que participó.
Tras su retiro en 1964, dirigió al Saprissa en varias oportunidades,
campeonizando en 1964, 1965, 1968 y 1969, y logrando el vice campeonato en 1966
y 1971.
En 1980 regresó para tratar de salvar al equipo del desastre deportivo que
vivía. Su carisma generó un cambio positivo, pero no pudo conseguir el
milagro.
Mario Cordero es miembro de la Galería del Deporte desde
1977
Uno de los grandes mitos en la historia del fútbol costarricense, Mario
Cordero es una de esas leyendas que trascienden el tiempo. Con un físico
privilegiado, desde muy niño dejó entrever en los terrenos cercanos a Plaza
González Víquez que tenía unas cualidades extraordinarias para el deporte.
Jorge Bolaños, uno de los primeros jugadores del Saprissa, llevó a su amigo
a probar suerte con el equipo que dirigía Beto Fernández. El entrenador intuye
todo el potencial del joven jugador, pero su corta edad le impide incorporarlo
en la delegación que en 1941 viaja a El Salvador a realizar una gira
internacional. Ya para 1942 era titular indiscutible del infantil que escalaría
posiciones hasta alcanzar el boleto para la Primera División.
Como jugador, Catato consiguió los títulos de Tercera y Segunda División,
así como los centros de 1952, 1953, 1957, 1962 y 1964 en la máxima categoría.
Durante la gira alrededor del mundo marcó cinco tantos y fue pieza fundamental
del seleccionado nacional tanto en las eliminatorias mundialistas como en los
Centroamericanos y en los Juegos Panamericanos en que participó.
Tras su retiro en 1964, dirigió al Saprissa en varias oportunidades,
campeonizando en 1964, 1965, 1968 y 1969, y logrando el vice campeonato en 1966
y 1971.
En 1980 regresó para tratar de salvar al equipo del desastre deportivo que
vivía. Su carisma generó un cambio positivo, pero no pudo conseguir el
milagro.
Mario Cordero es miembro de la Galería del Deporte desde
1977
Edgar Marín
Este extraordinario delantero alcanzó en 1977 la docena de títulos en la
Primera División, un extraordinario récord que sólo con la implementación de
los torneos cortos corre peligro.
Debutó a los 19 años en la máxima categoría coronándose campeón en 1962,
1964, 1965, 1967, 1968, 1969, 1972, 1973, 1974, 1975, 1976 y 1977. Hay que
sumarle los títulos de La Fraternidad de 1972, 1973 y 1978, así como un cetro
regional en 1970.
Aunque no conquistó ningún título, su regularidad en la red también le
permitió ser el mejor anotador en la historia del Deportivo Saprissa, con 108
goles.
Tendría que aparecer un artillero de la talla de Evaristo Coronado para
desbancar de este campo al hombre récord del equipo morado..
Este extraordinario delantero alcanzó en 1977 la docena de títulos en la
Primera División, un extraordinario récord que sólo con la implementación de
los torneos cortos corre peligro.
Debutó a los 19 años en la máxima categoría coronándose campeón en 1962,
1964, 1965, 1967, 1968, 1969, 1972, 1973, 1974, 1975, 1976 y 1977. Hay que
sumarle los títulos de La Fraternidad de 1972, 1973 y 1978, así como un cetro
regional en 1970.
Aunque no conquistó ningún título, su regularidad en la red también le
permitió ser el mejor anotador en la historia del Deportivo Saprissa, con 108
goles.
Tendría que aparecer un artillero de la talla de Evaristo Coronado para
desbancar de este campo al hombre récord del equipo morado..
Álvaro Murillo
De fácil gambeta y de una habilidad asombrosa, Álvaro Murillo se forjó un
nombre en letras de oro dentro de la historia del Deportivo Saprissa.
Nacido en la localidad de San Pedro de Poas el 24 de noviembre de 1930,
inició su carrera deportiva a los 10 años de edad, jugando para los infantiles
del Club Oriente de la ciudad de Heredia. Poco después se integra al infantil
del Club Sport Herediano.
En 1945 pasa a la tercera división del Orión, convirtiéndose en uno de los
referentes del equipo que poco tiempo después ascendería con el nombre de
Saprissa FC a la Primera División.
Como seleccionado nacional le correspondió participar varias eliminatorias
mundialistas, torneos Centroamericanos y del Caribe, así como en los Juegos
Panamericanos. Con el Deportivo Saprissa realizó la gira alrededor del mundo en
1959, de la que es máximo anotador, y reforzó al Club Sport Herediano en
partidos jugados en México y Honduras.
Tras un breve paso por el Orión SA, Murillo se retiró del fútbol como
jugador en 1964, desempeñando luego cargos directivos en su equipo y como
Director del Consejo Nacional de Deportes. Es miembro de la Galería de la Fama
de Costa Rica.
De fácil gambeta y de una habilidad asombrosa, Álvaro Murillo se forjó un
nombre en letras de oro dentro de la historia del Deportivo Saprissa.
Nacido en la localidad de San Pedro de Poas el 24 de noviembre de 1930,
inició su carrera deportiva a los 10 años de edad, jugando para los infantiles
del Club Oriente de la ciudad de Heredia. Poco después se integra al infantil
del Club Sport Herediano.
En 1945 pasa a la tercera división del Orión, convirtiéndose en uno de los
referentes del equipo que poco tiempo después ascendería con el nombre de
Saprissa FC a la Primera División.
Como seleccionado nacional le correspondió participar varias eliminatorias
mundialistas, torneos Centroamericanos y del Caribe, así como en los Juegos
Panamericanos. Con el Deportivo Saprissa realizó la gira alrededor del mundo en
1959, de la que es máximo anotador, y reforzó al Club Sport Herediano en
partidos jugados en México y Honduras.
Tras un breve paso por el Orión SA, Murillo se retiró del fútbol como
jugador en 1964, desempeñando luego cargos directivos en su equipo y como
Director del Consejo Nacional de Deportes. Es miembro de la Galería de la Fama
de Costa Rica.
Evaristo Coronado
Sus 148 goles en la Primera División, su lealtad a una sola camiseta y su
caballerosidad en el terreno de juego consolidaron a Evaristo Coronado como el
más grande ídolo en la historia del Deportivo Saprissa.
Nativo de Osa de Puntarenas, este extraordinario delantero llegó en 1981 al
Deportivo Saprissa, logrando en su primera temporada el título de goleador con
23 tantos, galardón que repetiría en 1988, con 19 anotaciones. Además, fue el
mejor anotador del Saprissa en las temporadas de 1981, 1985, 1987, 1988 y
1992.
Como morado, consiguió los títulos de 1982, 1988, 1989, 1994 y 1995.
También fue parte del equipo saprisista que ganó la primera Copa de la
CONCACAF en 1993. Entre los aspectos más curiosos en la carrera de Coronado
está el hecho de que nunca convirtió un gol de penal, fallando tres a lo largo
de su carrera.
Se retiró como futbolista a los 34 años, el 27 de agosto de 1995, en un
amistoso ante Comunicaciones de Guatemala, partido que ganaron los morados 3 a
1 en el estadio Ricardo Saprissa.
Integró la selección nacional de fútbol de Costa Rica entre 1983 y 1992
anotando 10 goles en 52 partidos. A pesar de su aporte para que la
representación patria clasificara al Campeonato Mundial, no formó parte de la
delegación que participó de manera destacada en Italia ‘90.
Como técnico, estuvo en el banquillo morado en varias ocasiones como
emergente, demostrando que incluso para estas lides tenía madera.
clic aquí para modificar.
Sus 148 goles en la Primera División, su lealtad a una sola camiseta y su
caballerosidad en el terreno de juego consolidaron a Evaristo Coronado como el
más grande ídolo en la historia del Deportivo Saprissa.
Nativo de Osa de Puntarenas, este extraordinario delantero llegó en 1981 al
Deportivo Saprissa, logrando en su primera temporada el título de goleador con
23 tantos, galardón que repetiría en 1988, con 19 anotaciones. Además, fue el
mejor anotador del Saprissa en las temporadas de 1981, 1985, 1987, 1988 y
1992.
Como morado, consiguió los títulos de 1982, 1988, 1989, 1994 y 1995.
También fue parte del equipo saprisista que ganó la primera Copa de la
CONCACAF en 1993. Entre los aspectos más curiosos en la carrera de Coronado
está el hecho de que nunca convirtió un gol de penal, fallando tres a lo largo
de su carrera.
Se retiró como futbolista a los 34 años, el 27 de agosto de 1995, en un
amistoso ante Comunicaciones de Guatemala, partido que ganaron los morados 3 a
1 en el estadio Ricardo Saprissa.
Integró la selección nacional de fútbol de Costa Rica entre 1983 y 1992
anotando 10 goles en 52 partidos. A pesar de su aporte para que la
representación patria clasificara al Campeonato Mundial, no formó parte de la
delegación que participó de manera destacada en Italia ‘90.
Como técnico, estuvo en el banquillo morado en varias ocasiones como
emergente, demostrando que incluso para estas lides tenía madera.
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Wálter "Paté" Centeno
Uno de los mejores futbolistas centroamericanos de todos los tiempos,
Wálter Centeno es actualmente el referente de la media cancha del Deportivo
Saprissa y de la selección nacional, camiseta que ha defendido en 137
oportunidades, récord centroamericano.
Es un organizador por excelencia y gran pasador cuya frialdad frente al
marco rival le permite conseguir una buena cantidad de goles por temporada.
Debutó oficialmente en 1994 con el equipo de Belén, con el que jugó en calidad
de préstamo, dejando entrever a un futbolista con un potencial enorme.
Dos años después regresó al Saprissa, conquistando dos títulos nacionales
antes de partir en el 2002 al futbol griego. Con el AEK de Atenas, tuvo el
honor de ser el primer jugador costarricense en anotar un gol en la Liga
Europea de Campeones al conseguir el tanto del empate frente al Real Madrid en
el Santiago Bernabéu. También lograría una segunda diana en este mismo torneo
al marcar el empate 1-1 frente al AS Roma, de nuevo como visitante en el
Estadio Olímpico de la capital italiana.
En el 2003 regresó al país para consolidarse como puntal del equipo que
conseguiría siete campeonatos nacionales en apenas ocho temporadas. Asimismo,
sumó un título de la CONCACAF y un tercer lugar en el Mundial de Clubes FIFA
Japón 2005.
Centeno ha jugado las tres ediciones de la Copa América a las que ha sido
invitada Costa Rica, así como los Campeonatos Mundiales de Japón y Corea 2002 y
Alemania 2006. Su retiro se produjo al finalizar el torneo de Verano de
2012.
Uno de los mejores futbolistas centroamericanos de todos los tiempos,
Wálter Centeno es actualmente el referente de la media cancha del Deportivo
Saprissa y de la selección nacional, camiseta que ha defendido en 137
oportunidades, récord centroamericano.
Es un organizador por excelencia y gran pasador cuya frialdad frente al
marco rival le permite conseguir una buena cantidad de goles por temporada.
Debutó oficialmente en 1994 con el equipo de Belén, con el que jugó en calidad
de préstamo, dejando entrever a un futbolista con un potencial enorme.
Dos años después regresó al Saprissa, conquistando dos títulos nacionales
antes de partir en el 2002 al futbol griego. Con el AEK de Atenas, tuvo el
honor de ser el primer jugador costarricense en anotar un gol en la Liga
Europea de Campeones al conseguir el tanto del empate frente al Real Madrid en
el Santiago Bernabéu. También lograría una segunda diana en este mismo torneo
al marcar el empate 1-1 frente al AS Roma, de nuevo como visitante en el
Estadio Olímpico de la capital italiana.
En el 2003 regresó al país para consolidarse como puntal del equipo que
conseguiría siete campeonatos nacionales en apenas ocho temporadas. Asimismo,
sumó un título de la CONCACAF y un tercer lugar en el Mundial de Clubes FIFA
Japón 2005.
Centeno ha jugado las tres ediciones de la Copa América a las que ha sido
invitada Costa Rica, así como los Campeonatos Mundiales de Japón y Corea 2002 y
Alemania 2006. Su retiro se produjo al finalizar el torneo de Verano de
2012.